Israel extiende hasta el 31 de agosto la evacuación de las fronteras con Gaza y el Líbano

El Gobierno de Israel extendió este domingo hasta el 31 de agosto la evacuación de las comunidades próximas a las fronteras con Gaza y el Líbano, según un comunicado de la Oficina del Primer Ministro, después de que los intercambios de fuego con las milicias palestinas y Hizbulá obligaran a desplazarse a unos 125.000 israelíes entre octubre y noviembre de 2023.

La medida, propuesta por el primer ministro, Benjamín Netanyahu, salió adelante “en vista de la continuación de los combates y las implicaciones operativas y de seguridad que surgen de la evaluación de la situación”.

Así, los ciudadanos de los asentamientos que se encuentran en una franja de hasta siete kilómetros junto a Gaza o hasta cinco junto a la divisoria con el Líbano continuarán desplazados, bajo financiación estatal, en los distintos hoteles y residencias en los que muchos llevan ya unos nueve meses.

El Ministerio de Turismo seguirá al cargo de gestionar los compromisos con las instalaciones de acogida, recogió el comunicado.

Asimismo, la Oficina del Primer Ministro dijo que el Ejecutivo prepara medidas para ampliar las prestaciones por desempleo de los desplazados.

El diario israelí Haaretz apuntó que las conversaciones en el seno del Gobierno de cara a prorrogar las evacuaciones plantearon también la necesidad de recortar gastos en otras áreas para poder financiar el desplazamiento de los residentes de las fronteras.

“Estamos en guerra. Al igual que a nadie se le ocurrió recortar los fondos del Ministerio de Defensa y el Ejército, a nadie debería ocurrírsele recortar los fondos del Ministerio de Seguridad Nacional”, dijo el titular de esa cartera, el ultraderechista Itamar Ben Gvir, para protestar contra un posible recorte de fondos, según recogió Haaretz.

Más de 60.000 personas se vieron obligadas a abandonar las comunidades próximas a la frontera con el Líbano, donde la milicia chií Hizbulá comenzó a lanzar cohetes el 8 de octubre, en respuesta a los ataques israelíes contra la Franja de Gaza.

Por otro lado, en torno a un 70 % de los 57.000 desplazados de las localidades cercanas a la divisoria con Gaza han podido volver a sus hogares, mientras el resto continúa también viviendo en hoteles u otras comunidades próximas.

En algunos de los kibutz (comunidades agrarias) más próximos a la divisoria con la Franja, como los de Beeri, Kfar Aza, Nir Oz o Kerem Shalom, el Ejército todavía no permite el retorno de sus residentes, ya sea por inseguridad -las milicias palestinas de la Franja continúan disparando cohetes al área- o porque siguen siendo inhabitables.

A principios de mayo, el director de la Administración de Tekuma, Moshe Edri, aseguró al canal 12 de la televisión israelí que los habitantes de Beeri, Kfar Aza y Nir Oz no podrán volver a sus hogares hasta dentro de “dos o tres años”.

Fuente: La Prensa