“Estamos en guerra y no cederé”, advirtió el presidente de Ecuador
En su primera aparición pública tras haber decretado “conflicto armado interno”, el presidente de Ecuador, Daniel Noboa, aseveró que su país se encuentra en guerra contra bandas del crimen organizado reclasificadas como “terroristas” y avisó que no negociará ni cederá ante estos grupos que tendrían en sus filas unos “20 mil hombres”.
El mandatario también advirtió a los jueces y fiscales que dan ayuda a estas mafias transnacionales: “Serán procesados como parte de la red que se ha convertido en enemiga del Estado”.
A criterio del dignatario, la violencia desatada el martes, que se saldó con al menos 18 fallecidos, fue una respuesta a “las acciones que estábamos tomando contra la inseguridad”.
Respecto a los casi 139 agentes penitenciarios que permanecen retenidos por presos en los penales de Cuenca, Azogues, Napo, Ambato y Latacunga, dijo que están “haciendo lo posible y lo imposible para traerlos sanos y salvos, pero no podemos parar una guerra por eso”.
“No vamos a ceder ante las estupideces que están acostumbrados a hacer”, continuó antes de subrayar que van a ser más estrictos que los Ejecutivos anteriores. De hecho, el Ejército queda habilitado para “neutralizar” al flamante adversario, tarea en la que la Policía Nacional pasa a operar como fuerza auxiliar.
En idéntica línea de compararse con administraciones precedentes, reprochó que uno de los peligrosos capos fugados, “en los últimos dos gobiernos entraba y salía como Pancho por su casa de la Cárcel”.
Finalmente, le planteó a su homólogo Gustavo Petro que se haga cargo de alrededor de 1.500 presos colombianos que permanecen en las cárceles ecuatorianas, lo que les permitiría bajar el hacinamiento de las prisiones.
EL DIA DESPUES
“El país está en relativa calma”, describió el secretario de Comunicación, Roberto Izurieta, quien resaltó que la nación está viviendo por primera vez “un momento de unidad” ante esta guerra.
El “parte bélico” de la jornada incluye 70 detenidos por supuestos actos terroristas, incluidos 18 encapuchados que irrumpieron en el canal público TC Televisión, asalto que dejó un camarógrafo herido de bala en la pierna derecha y otros dos empleados del canal con contusiones.
El comandante de la policía, Víctor Herrera, reveló que restan arrestar 2 de los 20 involucrados en ese ataque atribuido a la banda Los Tiguerones.
Asimismo, se logró la liberación de tres policías raptados por delincuentes, fueron recapturados 17 reclusos y se decomisaron explosivos, cartuchos, armas y vehículos, en operativos realizados en todo el territorio.
Infraestructura estratégica, sitios sensibles y algunos medios de comunicación en Quito y Guayaquil amanecieron custodiados por soldados.
En las calles de las principales urbes se observó poco tráfico vehicular, con muchos comercios cerrados y sin estudiantes debido a que las clases presenciales fueron suspendidas en todos los niveles de educación. Muchos empleados públicos y privados optaron por el tele trabajo.
ALERTA REGIONAL
Perú y Colombia reforzaron la frontera con Ecuador, y la ONU expresó su alarma por la situación y varios países llamaron a sus ciudadanos a no viajar, otros cerraron temporalmente sus embajadas y consulados en Quito y Guayaquil.
El gobierno de Lima se apuró a aclarar que diversos tipos de municiones de los arsenales de sus fuerzas armadas habrían llegado “en años anteriores” a las bandas mafiosas de Ecuador.
FUENTE : LA PRENSA