Irán se prepara para la segunda ronda de negociaciones con Estados Unidos sobre el pacto nuclear

Irán se prepara para una segunda ronda de negociaciones con Estados Unidos acerca de su programa nuclear, está vez en Europa, con una intensa actividad diplomática e insiste en que serán indirectas con el objetivo de levantar las sanciones. Ambos países ya mantuvieron el sábado pasado una primera ronda de negociaciones en Omán, en busca de un acuerdo sobre el programa nuclear iraní en unas conversaciones que Teherán calificó de “constructivas” y Washington como “positivas”.

Los dos países, que no mantienen relaciones diplomáticas, afrontarán el próximo sábado una nueva ronda que podría celebrarse en Roma, según fuentes del Ministerio de Exteriores italiano, siempre indirectas y bajo intermediación omaní. Teherán confirmó que la cita será en Europa, pero no aclararon en qué ciudad.

El vocero de la Cancillería, Esmaeil Baghaei, aseguró que Teherán no considera la ubicación de las conversaciones tan significativa como el marco en el cual se llevan a cabo. Indicó que las discusiones comenzarán de forma indirecta y que Omán conservará el papel de mediación.

Baghaei explicó que Mascate coordinará la nueva sede para la próxima ronda y expresó su aprecio por el papel de Omán en la realización de la etapa inicial de las negociaciones.

Ante estas segundas conversaciones, Irán despliega una intensa actividad diplomática con las próximas visitas a Teherán del director del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), Rafael Grossi, y del ministro iraní de Exteriores, Abás Araqchí, a Rusia, uno de sus más cercanos aliados.

Grossi llegará el miércoles por la noche a Teherán, donde se reunirá con Araqchí y con el jefe de la Agencia de la Energía Atómica de Irán (AEAI), Mohamed Eslami. “El compromiso y la cooperación continuos con el Organismo son esenciales en un momento en el que se necesitan urgentemente soluciones diplomáticas”, afirmó en X Grossi al confirmar la visita a la capital iraní.

El OIEA e Irán llevan años de disputa acerca del acceso de la agencia de la ONU al programa nuclear del país persa, con la expulsión de inspectores y el apagado de cámaras en los últimos años.

El organismo busca “conversaciones sustantivas, tangibles y concretas” sobre los diferentes aspectos del programa nuclear iraní, y en concreto sobre la producción de uranio altamente enriquecido, hasta un 60%, un nivel muy cercano al necesario para fabricar bombas atómicas.

Fuente: La Prensa