Al menos 17 muertos en las graves protestas en Kenia contra una subida de los impuestos
Al menos 17 personas murieron este martes en Kenia en las graves protestas contra un nuevo proyecto de ley que contempla subidas fiscales, tras una jornada de movilizaciones sin precedentes en la historia reciente del país que desembocó en el asalto al Parlamento, confirmó a EFE un plataforma integrada por una veintena de ONG.
Según detalló a EFE una fuente del Grupo de Trabajo sobre Reformas Policiales de Kenia (PRWG-Kenya), que incluye a organizaciones como Amnistía Internacional (AI), 14 de las muertes se registraron en Nairobi, donde la Policía abrió fuego al tratar de impedir sin éxito que los manifestantes accedieran al recinto del Parlamento.
Asimismo, las ONG documentaron hasta el momento 86 heridos, así como 52 arrestos, de ellos al menos 43 en la capital keniana, añadió la citada fuente, que quiso mantener el anonimato
PROTESTAS
Parte del edificio del Parlamento de Kenia quedó en llamas después de que miles de manifestantes que se oponen a más impuestos entraron y los legisladores huyeron, en el ataque más directo contra el gobierno en décadas. Los periodistas vieron al menos tres cadáveres fuera del complejo donde la policía abrió fuego.
Los manifestantes exigían que los legisladores votaran en contra de un proyecto de ley que impone nuevos impuestos en un país donde las frustraciones por el alto costo de la vida llevan años latentes.
Los inconformes, muchos de ellos jóvenes, superaron a la policía para ingresar al Parlamento poco después de que los legisladores votaron para aprobar el proyecto de ley. Algunos legisladores huyeron por un túnel, mientras que manifestantes permitieron a los congresistas de la oposición que votaron en contra del proyecto de ley salir del edificio sitiado.
Una persona muerta a tiros fue envuelta en una bandera nacional y se la llevaron.
La oficina del gobernador de Nairobi, miembro del partido gobernante, también estuvo brevemente en llamas. La oficina está ubicada cerca del Parlamento. Se utilizaron cañones de agua de la policía para extinguir el fuego.
Se podía escuchar a los manifestantes gritar: “Vamos por todos los políticos”.
La policía también disparó munición real y arrojó botes de gas lacrimógeno contra los manifestantes que buscaban tratamiento en una tienda médica instalada en una iglesia cerca del complejo del Parlamento.
La Comisión de Derechos Humanos de Kenia compartió el martes un video que mostraba a oficiales disparando contra los manifestantes, y dijo que los agentes tendrán que rendir cuentas.
La comisión escribió en la red social X un mensaje al presidente William Ruto. “¡El mundo observa su descenso a la tiranía! Las acciones de su régimen son un ataque a la democracia. Todos los implicados en el tiroteo, de forma activa o pasiva, deben rendir cuentas”.
Dos personas murieron en protestas similares la semana pasada.
Médicos en varias ciudades del país habilitaron refugios temporales de emergencia con suministros donados por otros keniatas.
La tercera ronda de protestas se producía mientras los legisladores votaban la propuesta de ley financiera, que introducirá nuevos impuestos como una ecotasa que incrementaría el precio de productos como pañales y artículos de higiene menstrual. Una propuesta de impuesto al pan se eliminó ante la indignación pública, pero los manifestantes seguían reclamando al Parlamento que no aprobara la norma.
La presidenta de la Sociedad de Derecho de Kenia, Faith Odhiambo, dijo el martes que 50 kenianos, incluido su asistente personal, habían sido “secuestrados” por personas que se creía eran agentes de policía.
Dijo que había casos de ejecuciones extrajudiciales, secuestros policiales, tortura y personas que habían estado retenidas e incomunicadas varios días.
Entre esos desaparecidos había personas que ocupaban posiciones destacadas en las protestas y que fueron sacados de sus casas, lugares de trabajo y espacios públicos antes de las protestas del martes, según grupos de la sociedad civil.
La policía no respondió en un primer momento a llamadas para pedir comentarios.
El presidente del Parlamento, Moses Wetangula, ordenó el martes al inspector general de policía que informara sobre el paradero de las personas que, según la oposición, habían sido secuestrados por la policía.
Ruto señaló el domingo que estaba orgulloso de los jóvenes que han salido a ejercer su derecho a un deber democrático y dijo que respondería a los jóvenes sobre sus preocupaciones. El martes, el presidente estaba fuera de la capital para asistir a una cita de la Unión Africana.
Fuente: La Prensa