Pachelo suma una nueva detención por un robo en un country de Ituzaingó en 2017
Nicolás Pachelo, absuelto en diciembre de 2022 por el crimen de su vecina María Marta García Belsunce y quien actualmente cumple pena de prisión efectiva por una serie de robos a viviendas de distintos barrios privados del Gran Buenos Aires, sumó hoy una nueva detención por otro hecho de ese tipo cometido en 2017 en un country de Ituzaingó, informaron fuentes judiciales.
La medida fue ordenada por el juez de Garantías 1 de San Isidro, Ricardo José Costa, a pedido del fiscal de Pilar Andrés Quintana, tras lo cual Pachelo fue notificado esta tarde en el penal de Gorina, donde cumple una sentencia a 9 años y medio de prisión.
De acuerdo al fallo de 8 hojas, el hecho ocurrió el 20 de julio de 2017 en el club de campo “Los Pingüinos”, situado en avenida Presidente Perón al 10200 de Ituzaingó.
En ese marco, junto a Matías Osvaldo Marasco, con quien también cometió un robo en el Country Tortugas de Pilar en marzo de 2018, ingresó a una vivienda cuyos moradores no se encontraban y sustrajo una caja de seguridad que contenía 250.000 dólares, 10.000 euros y 5.000 reales, además de distintos cheques y otros elementos de valor.
La autoría de Pachelo en el robo salió a la luz durante el juicio oral y público por el crimen de García Belsunce, en el cual el hombre también fue juzgado por distintos asaltos en barrios privados del Gran Buenos Aires.
En ese marco, durante una de las jornadas se exhibió un video aportado por la víctima del robo de Ituzaingó, por el cual ya había sido sindicado como autor Marasco, y se determinó que podría haber actuado junto a Pachelo.
A raíz de ello se desdobló la investigación y, además del testimonio de la víctima que reconoció a Pachelo como el cómplice de Marasco, la Policía Científica cotejó las filmaciones de las cámaras de seguridad del barrio privado con las fotografías del acusado, y determinó la compatibilidad fisonómica entre las mismas.
“Habiéndose analizado y confrontado exhaustivamente las distintas áreas que conforman las imágenes ´A´ (fotografía) y ´B´ (videos mp4/capturas) éste perito concluye que: Existe compatibilidad, ya que existen puntos compatibles, concordantes y cotejables, y puntos que no, y que, si bien las imágenes corresponden en su origen a distinta naturaleza, fotografía y videos mp4, las mismas se encuentran dentro del mismo rango de pertenencia”, aseguró el experto en su informe.
De este modo, y por las pruebas recolectadas, el juez Costa hizo lugar al pedido del fiscal Quintana y ordenó la detención de Pachelo por el delito de “robo agravado por haberse cometido con efracción”.
En un fallo dividido, Pachelo fue absuelto el 2 de diciembre del año pasado, en el tercer juicio que se hizo por el homicidio de García Belsunce, asesinada de cinco balazos en la cabeza el 27 de octubre de 2002 en el country Carmel de Pilar.
Sin embargo, el mismo Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 4 de San Isidro lo condenó a nueve años y seis meses años de prisión por una serie de robos cometidos entre 2017 y 2018 en countries del Gran Buenos Aires, que incluso él mismo confesó durante el debate.
En julio pasado el TOC 4 redujo en siete meses la condena a partir de una serie de cursos y talleres que hizo en prisión, por lo que Pachelo pidió su libertad condicional, pero los jueces rechazaron su pedido y dispusieron su traslado al penal de Gorina, bajo un régimen de alojamiento abierto.
En tanto, Quintana y los otros dos fiscales que actuaron en el juicio, Patricio Ferrari, y Federico González, apelaron la absolución de Pachelo, por considerar que la sentencia fue “arbitraria” y que los jueces que votaron en mayoría –Esteban Andrejin y Osvaldo Rossi-, “carecieron de imparcialidad”.
Si este mismo veredicto es confirmado en instancias superiores, el caso García Belsunce, uno de los de mayor repercusión en las últimas dos décadas, quedará impune, ya que, al haber pasado más de 15 años -el límite para la prescripción de las causas con delitos con pena de prisión perpetua-, no se puede investigar ni imputar a un ningún nuevo sospechoso.
Fuente: La Prensa