La CGT denunció el protocolo de seguridad y afirmó que el Gobierno quiere criminalizar la protesta
La conducción de la CGT, que colideran Héctor Daer, Carlos Acuña y Pablo Moyano, aseguró hoy que “la Constitución Nacional es la única garante del Estado de derecho”, y denunció que “el protocolo determinado por el Ministerio de Seguridad, a cargo de Patricia Bullrich, es una estrategia para criminalizar la protesta social” en la Argentina.
“La Constitución Nacional es la única garante del Estado de derecho. El protocolo difundido por Bullrich es parte de una estrategia para criminalizar la protesta social que, luego de los anuncios económicos y de los consecuentes impactos en la calidad de vida del pueblo, implica vulnerar el efectivo ejercicio del derecho constitucional de libertad de expresión y sindical”, sostuvo la central obrera en un documento de prensa.
La CGT denunció ese protocolo de seguridad y aseveró que “la medida vulnera libertades individuales y colectivas y no favorece el clima social, que requiere estar exento de violencia, presiones y amenazas, un elemento esencial para la libertad sindical”.
“Ese protocolo procura subordinar la acción de la justicia a las fuerzas policiales y de seguridad. Más allá de las evidentes reservas constitucionales de la medida, la central ratifica que los trabajadores siempre fueron los primeros en respetar la ley, porque saben que ello es la mejor garantía para que sus derechos sean respetados”, afirmó.
La conducción sindical puntualizó que “el respeto a la ley involucra a todos, es decir, a los ciudadanos y a las autoridades, que tienen que comprometerse de manera plena con la defensa de los derechos sociales consagrados en la Constitución Nacional”.
Los dirigentes añadieron que “la vigencia del Estado de derecho es el contexto democrático para hallar soluciones reclamadas en un momento crítico del país, para lo cual es necesario más que nunca el diálogo”, y ratificaron que “la consolidación de ese sistema de gobierno con justicia social es con más diálogo, democracia y paz social”.
Fuente: La Prensa