Apareció el arma con la que se suicidó el joven que atacó al árbitro, quien negó buscar dinero tras el hecho

El arma con la que el jugador Williams Alexander Tapón se suicidó tras golpear al árbitro Christian Paniagua en un partido de fútbol fue entregada finalmente por una hermana de la víctima en la comisaría Avellaneda 6ta de la Policía bonaerense, luego de que los uniformados la buscaran intensamente por la zona donde el joven apareció muerto.

Por su parte, Paniagua negó que le haya pedido dinero al joven para no denunciar la agresión, como lo afirmaron allegados al futbolista que se quitó la vida.

En cuanto al arma, se trata de un revólver calibre 38 Special, pavonado gris, Serie 275500, que contenía cuatro proyectiles, dos de ellos intactos y dos vainas servidas. Asimismo, se confirmó que el arma carece de impedimentos legales.

El revólver fue entregado por Priscila, una hermana de Tapón, quien se acercó a la comisaría Avellaneda 6ta para dársela a los uniformados, luego de que la fuerza bonaerense rastrillara intensamente toda la zona donde apareció el joven sin vida.

Los efectivos buscaron por la zona, pero “por el lugar y la oscuridad anoche no se encontró nada”, por lo que la fiscal Alejandra Olmos Coronel había ordenado un nuevo operativo.

“Tapón se quitó la vida en las vías del ferrocarril cercano.

Allí, lo encuentran familiares y amigos. El cuerpo es movido y llevado a la vereda del domicilio, a unos 30 metros. El ambiente era muy tenso. La fiscal autorizó el retiro del cuerpo, pero el arma no estaba. Ahora, se realiza el rastrillaje”, informaron.

La primera hipótesis que tiene la Justicia es que el joven de 24 años se suicidó, ya que minutos antes de aparecer muerto al costado de las vías del tren Roca en Gerli le envió audios pidiéndole perdón a su hermana y su novia: “Hasta acá llegué, me voy con la vieja”.

Williams Alexander Tapón fue encontrado muerto cerca de las 22 de este lunes en una zona baldía del ferrocarril, Roca sobre la calle General Paz al 1200, a metros de su vivienda.

El joven estaba imputado por “homicidio agravado por alevosía en grado de tentativa en el contexto de un espectáculo deportivo”, luego de que se diera a conocer la brutal agresión contra el árbitro Cristian Paniagua durante un partido en Avellaneda.

Además, la Agencia de Prevención de la Violencia en el Deporte (APREVIDE) le había prohibido de por vida el ingreso a espectáculos deportivos en la Provincia.

Estas cuestiones judiciales habrían sido clave para que tomara la decisión de quitarse la vida, esbozó su pareja: “Al rato me llega un audio de él. Estaba llorando. Se despidió y me dijo que cuide a nuestros hijos y que prefiere que sufran todo de una a que lo vean todos los días sufriendo en la cárcel, y ahí lo hizo”, relató Agustina, su novia.

 

HABLO EL ARBITRO

Por su parte, el árbitro que fue golpeado por Tapón, Christian Paniagua, aseguró él nunca quiso plata tras la agresión, negó la acusación sobre la solicitud de dinero para no denunciar el hecho y lamentó la drástica decisión que tomó el joven futbolista tras la viralización de lo ocurrido.

“No quería salir a hablar, pero se están diciendo muchas cosas que no son verdad. Yo hablé con él el domingo y le dije que por lo que hizo él no pude cobrar la fecha y que me podría haber matado. Yo buscaba una disculpa de corazón, no plata”, aseguró Paniagua.

En la misma línea, lamentó el suicidio de Tapón: “La intención no era que se suicidara, sino que se tome conciencia y que no reaccionen más con violencia. Lamento mucho la decisión que tomó el pibe”.

Sobre la agreisón sufrida durante el partido amateur de fútbol, Paniagua relató: “Vi que estaban tomando cerveza afuera de la cancha. En un momento del partido le saco la roja al siete, que luego me tira un cabezazo. Me voy para atrás, nunca veo a Williams que viene. Me pega unas piñas, me caigo y antes de poder levantarme me pega una patada en la cabeza. Me desperté yendo para el hospital”.

“Yo no quería que terminara mal. Yo hablé con él para ver si le salía una disculpa del corazón. Jamás le pedí plata. Le expliqué que yo era padre de familia, que era el primer partido, que no puede reaccionar así. Lo único que me dijo es que lo hizo en caliente”, sentenció el árbitro.

 

LA ACUSACION DE LA FAMILIA TAPON

La familia de Tapón responsabilizó al referí por la muerte del joven. Es que según afirmaron, Paniagua quería que el futbolista le diera “300 mil pesos” para que no lo denunciara.

La conversación fue filtrada por el entorno de Tapón en distintos medios televisivos: “Yo te entiendo, entiendo porque yo también estuve del lado de los jugadores, pero jamás les falté el respeto de querer ir a pegar. Repito, me podría haber matado”.

En los audios, el árbitro remarcó que le llegaban mensajes que lo alentaban a “hacer la denuncia” y “arruinar” a Tapón por la patada en la cabeza que le pegó el sábado pasado.

“Yo la verdad que no quiero eso. Quiero arreglar algo con el pibe y que se termine todo esto”, sostuvo al respecto, según los familiares de Tapón.

Paniagua continuó con ese relato en la comunicación y sostuvo que quería terminar el asunto ya que le “están rompiendo la cabeza” por unas deudas pendientes.

“A mí también me están rompiendo la cabeza, tengo unas cuentas que pagar y no pude por esa boludez que se mandó. Necesitaba esa guita, por algo fui a laburar doble turno (en referencia a los partidos del torneo que dirigió ese sábado) y al final salió todo mal”, afirmó.

Y añadió: “No es culpa tuya ni del equipo, es culpa de él. Yo le doy hasta la tarde para que se comunique conmigo, si no tarde o noche voy a tener que ir a hacer la denuncia. Me está apurando el abogado”.

Marisol, Marcelo, ambos hermanos de Tapón, y Agustina, la pareja de la víctima, acusaron directamente a Paniagua de querer chantajear al jugador para que no lo denunciara.

Fuente: La Prensa