Djokovic y Alcaraz jugarán el domingo la final del torneo de Wimbledon

El serbio Novak Djokovic, campeón vigente y número 2 del mundo en el ranking ATP, y el español Carlos Alcaraz, número 1 del escalafón, definirán este domingo en Londres la final del torneo de Wimbledon, tercer Grand Slam de la temporada.
Djokovic venció en primer turno al italiano Jannik Sinner (8) por 6-3, 6-4 y 7-6 (7/4) en dos horas y 46 minutos, y clasificó a su novena final en este Grand Slam.
Alcaraz, de 20 años, derrotó en la otra semifinal al ruso Daniil Medvedev por triple 6-3, con un punto final de extraordinaria definición por parte del tenista nacido en Murcia.
Djokovic, de 36 años, suma 7.595 puntos en el ranking mundial y se mantiene por debajo de Alcaraz (7.675).
El tenista serbio eliminó por segunda vez consecutiva en Wimbledon al mismo rival, 15 años menor que él, aunque en la edición pasada lo hizo en los cuartos de final.
En el caso de lograr su octava corona en Wimbledon, Djokovic igualará el récord histórico del suizo Roger Federer, ya retirado y uno de los mejores de la historia del tenis.
“Eso podía haber cambiado el curso del partido, me sentí muy nervioso tras la advertencia del árbitro pero logré controlarlo”, admitió el campeón vigente acerca de las palabras del árbitro por tardar más de 25 segundos para sacar.
“El tercer set podría haber sido para él, falló algunos golpes y me permitió ir al desempate. Siento mucha motivación y estoy inspirado para jugar el tenis que amo”, afirmó Djokovic tras su victoria.
En tanto que en la otra semifinal, Medvedev, tercer cabeza de serie y que al igual que Alcaraz disputaba su primera semifinal de Wimbledon, mantuvo el ritmo del primer cabeza de serie durante siete juegos.
Pero desde el momento en que Alcaraz rompió el saque de Medvedev y se puso 5-3 en el primer set, dio la sensación de que nada podría detenerlo.
Dos quieres de servicio sellaron el segundo set y el español aceleró hacia la victoria con otro quiebre al principio del tercero antes de cerrar la victoria en una hora y 50 minutos de juego.
Fuente: La Prensa