La Justicia autorizó a Cristina a salir al balcón para saludar a sus militantes pero deberá usar una tobillera electrónica

El Tribunal Oral en lo Federal Criminal 2 autorizó a la ex presidenta Cristina Kirchner el uso del balcón en el domicilio de San José 1111 donde cumple prisión domiciliaria por la causa Vialidad, y ordenó, además, la colocación de la tobillera electrónica a la ex mandataria condenada.

En la resolución, los jueces Jorge Gorini y Rodrigo Gimenez Uriburu sostuvieron: “El tribunal no ha vedado el uso y goce de ningún espacio específico de la arquitectura del inmueble en el que habita”, pero aclararon que “se espera de la solicitante el criterio, la prudencia y el sentido común suficientes para discernir en qué contexto el uso del balcón resultará una acción inocua y en cuál podrá implicar una perturbación para la tranquilidad y la convivencia pacífica del vecindario”.

“En virtud de lo expuesto, el tribunal da por aclarada la incertidumbre traída a estudio, lo que así se resuelve”, señalaron los magistrados.

Por otro lado, los jueces incorporaron a la resolución la nota remitida por la Dirección de Asistencia de Personas bajo Vigilancia Electrónica del Ministerio de Seguridad Nacional, como así también los informes técnicos acompañados y, en virtud de ellos, dispusieron la colocación del dispositivo electrónico que habían ordenado en la resolución del 17 de junio último.

La defensa de la ex mandataria había solicitado ayer precisiones sobre si podía salir o no al balcón del domicilio, donde desde la semana pasada se congregan miles de militantes.

La presentación la habían hecho los abogados Carlos Beraldi y Ary Llernovoy, y el tribunal encargado de la ejecución de su condena a seis años de prisión por administración fraudulenta tenía plazo hasta el martes próximo para responder.

En la resolución del 17 de junio en la que se le otorgó el beneficio de la prisión domiciliaria no se había aludido de manera concreta a ninguna actitud o conducta en especial y se le ordenó “abstenerse de adoptar comportamientos que puedan perturbar la tranquilidad del vecindario y/o alterar la convivencia pacífica de sus habitantes”.

Fuentes judiciales explicaron que el tribunal no había prohibido ninguna actividad concreta mientras se cumpliera con el arresto domiciliario y lo vinculado a la tranquilidad del barrio.

Pero lo que ocurra puertas afuera del domicilio debe ser controlado por las autoridades locales en base al Código Contravencional vigente, explicaron fuentes del caso.

La prisión domiciliaria será supervisada por la Dirección de Control y Asistencia de Ejecución Penal que elevará un informe a Gorini, presidente del tribunal, cada tres meses.

La ex presidenta ya anunció que apelará ante la Cámara Federal de Casación las condiciones impuestas en su arresto en tanto se espera que el fiscal federal Diego Luciani también cuestione la concesión del beneficio ante ese tribunal.

Fuente: La Prensa