Jaque de Estados Unidos a Amazon

La Comisión Federal de Comercio (FTC) y 17 estados de Estados Unidos presentaron ayer una demanda judicial en la que acusan a Amazon de ejercer un monopolio para inflar los precios, degradar la calidad de los productos para los compradores y excluir ilegalmente a sectores del negocio minorista en línea presionando a los comerciantes y favoreciendo sus propios servicios. Esta demanda, en caso de que prospere, podría transformar la forma en que los estadounidenses compran por internet cualquier producto, desde el papel higiénico a los electrodomésticos.

La acusación, un verdadero desafío contra el gran supermercado on line, se centra en que la compañía impidió a los comerciantes ofrecer en su plataforma precios más bajos en otra parte y los obligó a enviar productos con sus servicios de logística si querían formar parte del paquete de suscripción Prime. Estas prácticas llevaron a precios más altos y peor experiencia de compra para los consumidores.

La FCT apunta directamente a las llamadas medidas antidescuento que aplica Amazon para castigar a los vendedores y desalentar a otros minoristas a ofrecer ofertas mejores y más competitivas que los precios de la plataforma. Esto condujo a mantener los precios más altos para todo tipo de productos a través de internet.

Además, la empresa fundada por Jeff Bezos en 1994 requería de manera efectiva que los vendedores usaran sus costosos servicios de cumplimiento para obtener la tan cacareada etiqueta de Prime

para sus productos, de lo que deduce que resultó mucho más caro hacer negocios en su plataforma.

Esto no solo ha degradado la experiencia de la compra en Amazon, insiste la comisión y los estados, sino que ha obligado a los vendedores a pagar costosas tarifas para comercializar sus productos en ese sitio, de forma que no les quedaba otra opción que “confiar en Amazon para mantenerse en el negocio”.

 

HITO IMPORTANTE

Esta demanda es un hito importante para la presidenta de la FTC, Lina Khan (foto), que alcanzó relevancia en 2017 por un documento elaborado en la Universidad Yale titulado La paradoja antimonopolio de Amazon. En ese artículo esgrimió que el marco antimonopolio vigente no logró captar el verdadero alcance del dominio de Amazon y del potencial daño sobre la competencia. Khan propuso en ese ejercicio borrar ese marco y ampliar los límites de la ley antimonopolio mediante arriesgadas batallas legales.

Amazon  instó la recusación de Khan en estas investigación sobre su negocio argumentando que en ese escrito previo mostraba prejuicios contra la plataforma y viciaba la prueba.

“La demanda hoy presentada pretende que Amazon rinda cuentas por sus prácticas monopólicas y se restaure la promesa perdida de la competencia libre y justa”, subrayó Khan tras el anunció de esta iniciativa.

La acusación es la culminación de siete años de presión de la autoridad federal ante las denuncias de prácticas anticompetitivas formuladas por rivales, vendedores y legisladores. Amazon es una de las cuatro grandes tecnológicas que fue investigada por el comité antimonopolio de la cámara baja del Congreso de Estados Unidos y que concluyó que había mantenido el poder del monopolio respeto a la mayoría de los vendedores y numerosos suministradores.

En aquella ocasión, un portavoz de la plataforma replicó que “las grandes compañías no son dominantes por definición y la presunción de que su éxito es solo el resultado de su conducta anticompetición es simplemente incorrecto”.

Desde su irrupción como empresa de libros on line, la evolución de Amazon ha conducido hasta la conversión en un gigante que controla el mercado minorista, la publicidad y la nube computacional, con un valor de mercado de 1,4 billones de dólares. También ha tratado de extender su dominio en el campo de la salud, de servicio de streaming y los comestibles. Para esto ha comprado la proveedora sanitaria One Medical, los legendarios estudios MGM y la cadena de supermercados Whole Foods.

 

LOS TRUCOS

El responsable de la Oficina de Competencia de la FTC, John Newman, argumentó ayer que “raramente” en la historia de las leyes antimonopolio de Estados Unidos una demanda como la presentada tiene tanto “potencial de hacer tanto bien a tanta gente” en caso de prosperar.

Entre las tácticas que cita la demanda está la forma en que Amazon “entierra” u oculta los descuentos de vendedores para evitar que aparezcan en las búsquedas.

Igualmente habla de métodos exclusionistas como el de dificultar las búsquedas o incluir en ellas “anuncios basura” para hacer que los compradores desistan de seguir buscando los mejores precios y accedan a pagar más.

O también trucar dichas búsquedas para que siempre aparezcan antes los productos elegidos por la compañía por delante de otros de mayor calidad.

Además, la demanda acusa a Amazon de sobrecargar las tarifas de cientos de miles de vendedores “que no tienen actualmente otra forma de mantenerse que utilizando” esta plataforma.

Desde las tarifas mensuales a un porcentaje por cada producto vendido, según la demanda, Amazon ha llegado a cargar a muchos vendedores el 50 % de lo que ganan por vender en la plataforma, lo que supone un daño no solo para estos comerciantes sino también para los consumidores, que deben pagar mucho más.

Con esta demanda, la FTC busca un requerimiento federal permanente que prohíba a Amazon las citadas prácticas.

Los estados de Connecticut, Delaware, Maine, Maryland, Massachusetts, Míchigan, Minnesota, Nueva Jersey, Nuevo Hampshire, Nuevo México, Nevada, Nueva York, Oklahoma, Oregon, Pensilvania, Rhode Island y Wisconsin se unieron a la FTC en esta demanda.

Fuente: La Prensa