Detuvieron en Bolivia a un taxista que violó a una joven en 2015 y se encontraba prófugo

Tito Franklin Escobar Ayllon, el taxista que estaba prófugo desde abril de 2015 como acusado de violar a una pasajera en el barrio porteño de Colegiales, y por quien se ofrecía una de las mayores recompensas económicas en el país para quien aportara datos para que sea encontrado, fue detenido hoy en la ciudad boliviana de El Alto.

La captura de Escobar Ayllon, quien estaba primero en la lista de prófugos más buscados por la Unidad Fiscal Especializada en Investigación Criminal Compleja (UFECRI), se concretó alrededor de las 14.45 en inmediaciones del Mercado de Ciudad Satélite, situado en dicha zona de la provincia de Pedro Domingo Murillo, del departamento de La Paz, por agentes del Centro de Investigación Policial de Bolivia.

A partir de la información brindada por el Departamento Inteligencia Contra el Crimen Organizado de la Policía Federal Argentina, los detectives se habían constituido en la Zona Tembladerani, en Bolivia, en búsqueda de Escobar Ayllon, imputado del delito de “abuso sexual agravado por el acceso carnal”.

En ese marco, observaron que los padres del fugitivo salieron de su domicilio con dirección a El Alto, donde posteriormente tomaron contacto con un hombre de características y rasgos fisonómicos similares al prófugo.

A raíz de ello, los agentes procedieron a identificar al sospechoso y finalmente lograron su detención, por quien el Ministerio de Seguridad ofrecía actualmente 5.000.000 de pesos por quien aportara datos sobre su paradero.

En Bolivia, el prófugo también trabajaba como taxista, el mismo oficio que realizaba cuando fue acusado del abuso sexual de su pasajera.

El juez en lo Criminal y Correccional 2, Manuel Gorostiaga, había emitido un pedido de captura internacional de “código rojo” para el sospechoso, tan solo cinco días después del abuso sexual de una joven, ocurrido el 19 de abril de 2015.

La búsqueda del acusado fue encomendada a los detectives de la PFA, quienes confirmaron que Escobar Ayllon había huido al Estado Plurinacional de Bolivia, país del que es oriundo.

Los pesquisas lograron intervenir líneas telefónicas de familiares del taxista y tras determinar sus domicilios, allanaron sus viviendas .con resultado negativo- ubicadas en las provincias de Buenos Aires y Jujuy, como así también en el país vecino.

En tanto, con el correr de los meses los agentes establecieron que tanto la madre del fugitivo, como la pareja de ella, enviaron en distintas oportunidades dinero a una mujer que residía en la ciudad de El Alto, y que resultó ser la novia de Escobar Ayllon.

La información obtenida fue transmitida a la Dirección de Inteligencia Criminal de Bolivia, quienes a partir de esos datos encomendaron al Centro de Investigación Policial de ese país el operativo que culminó esta tarde con la captura del prófugo.

De acuerdo al Registro Nacional de Reincidentes (RNR), Escobar Ayllon aparecía entre “los más buscados”.

En abril pasado, al cumplirse ocho años de la agresión sexual, Manuela Ponz, la víctima del abuso, expresó su desánimo, en declaraciones, respecto a la búsqueda del sospechoso.

“Hay momentos cruciales en las investigaciones y en este caso se perdieron desde un primer momento. Obviamente que seguimos solicitando recursos en el juzgado para mover la causa, pero no depende solo de la Justicia. También entran en juego auxiliares policiales que hacen las investigaciones de paradero”, afirmó en diálogo con esta agencia Ponz, quien se desempeña actualmente como abogada penalista.

A raíz de lo sucedido, Ponz escribió y publicó en 2022 el libro “La mala víctima” en el cual cuestiona “el estándar de lo que es ser una buena víctima que propone el sistema patriarcal”.

“Por más que en el momento te parezca asqueroso y desagradable, entiendo que las víctimas sigamos siendo siempre víctimas es parte de un aleccionamiento patriarcal”, explicó.

El hecho ocurrió el domingo 19 de abril de 2015 durante la madrugada, cuando la joven salió de un bar de Colegiales y como una amiga suya se había quedado con sus pertenencias, caminaba llorando hacia la parada de un colectivo.

De acuerdo a su relato, en esas circunstancias fue abordada en la esquina de avenida Federico Lacroze y Olleros por un taxista que le ofreció llevarla hasta su casa.

A las pocas cuadras, Manuela se quedó dormida y se despertó cuando el hombre se hallaba sobre ella y ya le había sacado la bombacha.

Si bien intentó persuadirlo diciéndole que era VIH positiva, el taxista se colocó un preservativo, la violó y la dejó abandonada en la esquina de Artigas y Arregui.

Tras el hecho, la Justicia detuvo a un taxista como supuesto autor de la violación, pero horas después fue liberado por orden del juez de instrucción Gorostiaga, a cargo de la causa, tras una diligencia en la que la víctima no lo reconoció.

Luego, la denunciante participó de una rueda de reconocimiento fotográfica ante el fiscal Eduardo Cubría, en la que reconoció a Escobar Ayllon como el presunto abusador.

 

ALIVIO

Tras la detención del taxista prófugo, la joven que en 2015 fue abusada sexualmente aseguró que se siente “aliviada” por su detención y afirmó estar “preparada para enfrentarlo en un tribunal”.

“Me representó alivio después de tantos años. Traté de tomarme estas 24 horas para procesar un poco la noticia. Estoy preparada para enfrentarlo en un tribunal”, manifestó en diálogo con el canal A24 Manuela Ponz (28), quien fue atacada sexualmente la madrugada del 19 de abril del 2015 cuando viajaba a bordo del taxi Chevrolet Spin de Escobar Ayllón tras salir de un bar del barrio de Colegiales.

Al respecto, Manuela afirmó que “le da fiaca” poner en pausa su vida para afrontar un litigio judicial, aunque señaló estar “lista hace ocho años” para que llegue ese momento.

“Yo sané. Es posible cerrar un episodio así y seguir adelante. Hay que hacer un trabajo muy grande y estar entrenada. Si tenés una red de contención es más fácil. También influye si el Estado también te acompaña, pero no fue mi caso”, contó la joven.

Por otro lado, Manuela indicó que el hecho de que Escobar Ayllón vaya a la cárcel “no va a reparar su daño” y apuntó contra la Justicia por las demoras que tuvo la investigación.

“Con esto se termina un ciclo que no tiene que ver con el tipo que me violó, sino con la Justicia en sí. El acceso a la justicia es algo integral, que pueda tener cara a cara al tipo que me violó y que él responda ante la justicia. Yo estuve ocho años respondiendo ante la Justicia y los medios como si yo hubiese sido la que hizo algo mal. Todo para que la causa no se muera en los tribunales. Eso te hace pensar que le justicia es una mierda”, opinó la joven, quien se desempeña actualmente como abogada penalista.

En ese sentido, Manuela continuó: “Creo que la Justicia dice que evolucionó y sigue siendo igual. Hay mucha gente valiosa en la justicia que hace mucho por cambiar, pero sigue habiendo altos mandos que son dinosaurios, Y hasta que no cambiemos el sistema judicial vamos a tener que seguir lidiando con los jueces que absuelven (en el caso de) Lucía Pérez. No soy de la idea de tirar a los viejos por la ventana, pero en el caso de la Justicia espero que se mueran pronto”.

Además, Ponz le deseó a su victimario que “pueda recapacitar en la cárcel y entender que eso no se hace”.

“No se le puede arruinar así la vida a una piba de 20 años. Hay mucha misericordia en mi corazón. Yo creo que no es algo que me hizo a mí puntualmente. Cuando una persona viola genera mucho dolor. No solamente en la víctima, sino en las familias. La de la víctima y en la suya. Sé que él tiene hijas. Ahora pienso en ellas y ojalá ellas lo puedan perdonar”, añadió

Sobre el momento en que supo de la detención del agresor, Ponz dijo al canal C5N: “Me avisó ayer por la tarde Mercedes La Gioiosa, secretaria de Política Criminal del Ministerio de Seguridad de la Nación. Recibí la noticia con mucha alegría. Hoy amanecí con otra energía, creyendo que el mundo puede ser un poco más justo. Tengo muchas ganas de meterme en la causa, pero ahora estoy embarazada de seis meses. Tengo que cuidarme mucho y preservarme. Las ganas están, vamos a ver si el cuerpo lo permite”.

“Fueron años muy complejos. Me pude apoyar en otras, que me acompañaron y me levantaron. Somos muchísimas mujeres que esperamos este día casi tanto como yo y que lo sienten como una victoria personal. Me di cuenta de que esto no me pasó porque era mi culpa. Me pasó porque me crucé con un violador, nada más que eso”, reflexionó Ponz, quien escribió y publicó en 2022 el libro “La mala víctima” en el cual cuestiona “el estándar de lo que es ser una buena víctima que propone el sistema patriarcal”.

Fuente: La Prensa